Una boda es uno de los highlights de la vida de cualquier persona. Ese día los novios desean que todo salga a la perfección. Hay gente que las planea durante meses, e incluso durante años. Y ahora cada vez son más quienes eligen lugares fuera de lo común para sus nupcias, o también para su luna de miel.

Poca gente pensaría, por ejemplo, en Oporto. La localidad portuguesa es una de las más baratas de toda Europa, además de contener una alta dosis de romanticismo: vistas privilegiadas desde la Torre de los Clérigos, el famoso Café Magestic, el Mercado de Bolhao… Sin duda, un destino apto y asequible para los bolsillos.

Torre de los Clérigos, Oporto

Aunque para destino sui generis tenemos las Islas Feroe. Paisajes idílicos, rincones inimaginables, desconexión total, contacto absoluto con la flora y la fauna y precios muy bajos. Quizá nadie tenga a este territorio entre sus preferencias para un viaje de casado, pero probarlo le hará cambiar de opinión.

Aunque para celebrar una boda como tal, encontrar lugares de ensueño en España y a la vez diferentes a la típica iglesia de turno puede ser ideal. El Palma Aquarium Eventos, en Mallorca, es un parque marino de grandes dimensiones donde se puede elegir entre diversos espacios, con diferentes vistas y encantos. O Faunia, un Parque Temático de la Naturaleza ubicado en Madrid y que dispone de diferentes ubicaciones para celebrar el casamiento más original posible. Y también en Sant Miquel del Fai, en Barcelona, existe un área donde las cascadas y la roca aderezarán a lo grande un enlace. Este lugar, además de contar con una terraza-mirador y un patio de gruta, tiene una iglesia única en el país, ya que fue construida en el interior de una cueva en el siglo IX.

Sant Miquel del Fai

Más allá de todos estos lugares idílicos, hay que destacar aquellas ciudades denominadas gayfriendly. Ahora que han mejorado los derechos de los homosexuales, ciudades clásicas como Barcelona, París, Londres, Berlín, Ámsterdam o Praga gozan de ese distintivo que hará más agradable si cabe la estancia de una pareja gay. Aunque también hay otras ciudades gayfriendly como Mikonos, Ibiza, Las Palmas de Gran Canaria, Sitges, Copenhague o Colonia.

Copenhague

Cada vez más a menudo, dejando a un lado el colectivo o el país de cada uno, las personas tratan de buscar un lugar y forma original de darse el “sí quiero”. Como aquellas que eligen un todo incluido con boda y viaje de novios en Suráfrica. Allí, tienen la posibilidad de casarse a lomos de un elefante. Aunque también están los que prefieren hacerlo bajo al agua rodeados de tiburones, otros que lo hacen en paracaídas, en una capilla de hielo como la que hay en un hotel del Quebec… Incluso hay opción para aquellos que se quieran unir en el Titanic, gracias a la famosa reproducción que se ha hecho de la embarcación en Tennessee. Todas estas opciones, claro está, ya suponen una desembolso más elevado.

Casarse a bordo del Titanic