A la hora de elegir el vestido que vamos a llevar en nuestra boda y antes de pensar en si sois altas o bajas, esparraguines o rellenitas, pensad siempre que a las altas los volúmenes les dan un equilibrio que proporciona sus figuras, que las bajas tenemos la inestimable ayuda de los tacones, que los tejidos con volumen dan más entidad a las delgadas y que la línea evasé parece que la inventaron como la mejor aliada de las caderas anchas.

En resumen, que siempre hay solución para todo, y a la hora de elegir el vestido de novia sólo habréis de tener en cuenta esa premisa básica: la respuesta a tres preguntas ¿cómo soy y cómo quiero que sea mi vestido?, ¿qué quiero disimular y qué quiero resaltar de mi cuerpo? y, finalmente, ¿quiero un vestido con cuerpo o con caída?

Lo anteriormente expuesto responde a las dos primeras preguntas. La tercera nos dará la pauta para elegir el tejido y comenzar a diseñar nuestro vestido. El color, los brillos, los apliques, los complementos vendrán después, como elementos que realzarán la prenda.

Si queremos un vestido con caída probablemente no usaremos cancán o lo usaremos con muy poco volumen pues la sensación de prenda vaporosa será la nota predominante del vestido. Las gasas, los satenes muy finos o pieles de ángel, los crêpes saten finos, los georgettes, así como los forros suaves de seda o satén serán los materiales de vuestro vestido. Después podremos incorporar drapeados o no, u otros elementos que estructuren la prenda, pero la caída sobre todo en falda y mangas (si las ponemos) será la nota dominante.

Si queremos un vestido con volumen, con entidad o empaque necesitaremos, por el contrario, materiales más modelables, que admitan pliegues, como los tafetanes, las sedas salvajes y dupiones, los rasos con cuerpo, las organzas en sus diferentes texturas más o menos rígidas, y forraremos el vestido con forro de armar, suave al tacto pero firme a la hora de sostener el vestido y no tirar de él y podremos dar volumen a todo el vestido o sólo a la falda, para lo que necesitaremos indudablemente un buen cancan o habremos de armar mucho el vestido por dentro con tules y tarlatanas.

Tipos de cuerpo:

• Forma triángulo: es decir, estrecha de arriba (pecho y hombros) y ancha de caderas.Utiliza drapeados, adornos o encajes en la parte superior, así las miradas se centrarán arriba y no en las caderas, lo ideal son los vestidos en corte A.

• Forma de reloj de arena: busto y caderas proporcionados, y cintura estrecha.Utiliza vestidos ajustados de cintura y con caída como el corte sirena.

• Forma de triángulo invertido: ancha de arriba (pecho y espalda) pero caderas y piernas finas.Utiliza escotes en cuello V, así como bordados, adornos, pedrería y drapeados en las caderas con la finalidad de marcarlas visualmente.

• Forma de cuadrado: busto, cintura y caderas iguales.Utiliza vestidos en capas que añadirán forma, volumen y feminidad a una silueta sin curvas.

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