Consejos para elegir la Luna de Miel
A la hora de elegir el viaje de novios muchos, probablemente, ya tendrán una idea desde hace mucho tiempo, pues hay quien lleva toda la vida queriendo visitar Nueva York, China o las islas Sheichelles, y en esos casos sólo hay que preparar el presupuesto y coger la maleta. Pero a los que no lo tengáis tan claro os vamos a dar algún consejillo.
Lo primero a tener en cuenta es la época del año en la que se va a realizar el viaje, pues, por ejemplo, no es aconsejable viajar a Thailandia entre mayo y octubre por ser época de monzones, o a Egipto en Julio por el calor insoportable. Pero eso no quiere decir que no se pueda ir, es sólo que contéis con ello.
Y partiendo de estas bases, os debéis preguntar ¿qué es lo que buscáis en vuestro viaje de novios?, ¿relax?, ¿turismo cosmopolita?, ¿aventura?, ¿naturaleza?, ¿historia?,…
Si buscas relax y tirarte a tomar el sol en una hamaca lo más recomendable es el Caribe, pues puedes encontrar Hoteles y Resort con todo lo que te imaginas a precios razonables. También hay una amplia oferta de cruceros por el caribe, que te permitirán visitar distintos destinos. Pero si quieres que sea un relax más exótico, y con ello bastante más caro, tienes las islas Seychelles o Bali, por ejemplo.
Si buscas un turismo más cosmopolita, esto es visitar museos y tiendas, restaurantes de todo tipo, calles llenas de luces y espectaculos, etc… tienes desde circuitos por Norte América hasta Japón.
Si buscas naturaleza tienes desde un safari africano hasta Argentina visitando la Patagonia o Brasil con el Amazonas.
Si buscas historia puedes elegir toda Europa, Egipto, Turquia, Jerusalem, e incluso un crucero para poder visitar varias ciudades.
Mi consejo es que, si no eres de los que lleva toda la vida pensando en un destino en concreto, te fijes un presupuesto razonable (a partir de 3000 euros) y partas desde esa base, pues para subir siempre hay tiempo.
Resulta también absolutamente fundamental informarse al máximo sobre los destinos a visitar, el viaje realmente comienza en ese momento, disfrutando el placer de conocer sobre el destino, ponerlo en contexto, recabar ideas sobre qué hacer y qué visitar, localizar los recursos turísticos en el mapa…Con ello no sólo se garantiza el mejor aprovechamiento del tiempo sino también se minimiza el riesgo de que las cosas salgan mal.
¿Por qué no incluyes tu viaje de novios en tu lista de bodas?